Empecé a correr, porque mis hijos me animaron, el médico me recomendó
ejercicio y ellos salían a correr con regularidad, así que en verano y con
tiempo libre me animé a correr.
Sigo corriendo porque me gusta, al menos esa es la versión oficial, en
realidad, aparte de que me gusta de verdad, corro, porque cuando corro no estoy
enfermo, ese "alter ego", lento y patoso, no puede alcanzarme.
Mientras corro, vuelvo a ser el Xaviero de siempre, ágil, con ganas de reír,
mientras corro, no hay enfermedad, no hay crisis, solo estoy yo contra mí mismo,
vuelvo a sentirme con fuerzas para luchar, y lucho, y doy gracias por ello,
porque aún me queda el coraje para no rendirme.
Winter is Coming.
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