La razón más
plausible es que es una frikada, claro que también podría ser mi tendencia a esquivar
los cánones preestablecidos, en nuestras alianzas matrimoniales no pone fechas
ni nombres, una escueta frase en cada una, el joyero me miraba y preguntaba.-de
verdad no pongo la fecha….creo que aún intenta comprender las razones de tal
petición.
Las primeras
no eran exactamente bambas para correr, unas Boomeran negras, cuando me las
puse me quedé mirándolas, al cabo del rato les dije vamos a sufrir juntos, coincidieron con el inicio de esta blog, y las
llame “Winter is Coming”, igual que la firma en las entradas de este blog, no
les puse ese nombre por capricho, Winter is Coming es el lema de los Stark, de
Invernalia en Juego de Tronos, básicamente significa que vienen tiempos malos,
pero no desde la vertiente negativa, sino que sabemos lo que viene y estamos
preparados, me pareció muy apropiado, se lo que me espera y estoy preparado
para combatir,
Con ellas
hice 61km, que es la distancia que separa mi casa de mi casa, eso sí, dando
152.5 vueltas a la manzana.
Las siguientes
son las que llevo ahora, una Asics gel 1100, buenas bambas, a estas les puse “Forest
Gump”, no lo hice como se podría pensar por la escena en la que Forest corre
por los caminos de su Alabama natal, con los aparatos en las piernas, que acaba
rompiendo para seguir corriendo sin parar, en realidad le debe su nombre a esa otra escena en la que Forest
está sentado en un banco y le dice a la persona que está a su lado aquella
famosa frase
.- mi mama
dice que la vida es como una caja de bombones, nunca sabes cuál te va a tocar.
Nunca he oído
una descripción de la vida más acertada, por muchos planes que hagas, al final
te toca el bombón que te toca.
Con estas
llevo 429km, que son la distancia que separa mi casa de cualquier lugar que
este a 429km de mi casa.
Las últimas
no son propiamente de correr, pero se han ganado su derecho al bautizo, las
compre una tarde primaveral en una gran superficie dedicada al deporte, como no
me pagan no digo el nombre, la publicidad rezaba “el calzado ideal para caminar
por la ciudad”, así que como tenía intención de volver caminando a casa me las
puse allí mismo, a los quinientos metros más o menos me empezaron a doler los
talones, que resulta que no son de Aquiles, son míos, llegue a casa muerto y al
quitarme las bambas tenía los talones ensangrentados, de la que te has librado
Aquiles, se llaman “Walking Dead”
Con estas no
cuantifico la distancia, pero teniendo en cuenta que las utilizo para trabajar,
después de domesticarlas claro, que son diez horas al día de lunes a viernes, y
seis o siete el sábado, tienen en sus suelas muchísimos más kilómetros que las
otras dos juntas.
Que son lo
km. que separan mi casa del punto en el que empezaré a plantearme rendirme en
esta guerra.
Winter is
Coming.
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